26 ago 2008

CRÓNICAS DEL LABERINTO

Portada de "Contrafábula" que incluye también "Crónicas del laberinto" cuya primera edición está agotada.

CRÓNICAS DEL LABERINTO

Este libro obtuvo el Premio Feria del Libro de Madrid, en su primera edición. Lo publicó la propia Feria, 1992, con prólogo de Juan Van-Halen

El jurado, de auténtico lujo, estaba compuesto por José Hierro, Rafael Montesinos, Claudio Rodríguez, Félix Grande, Fernando Beltrán, Juan Van-Halen, Eduardo Huertas y Carlos Arés)

Fue el libro con el que “volví a la vida” poética, que casi había abandonado desde 1973 cuando salió mi primer libro, “ENCUENTROS” que había sido accésit del Premio Adonáis. El porqué de tan larga y extraña ausencia, junto a otras historietas lo cuento en el prólogo de “CONTRAFÁBULA, POESÍA REUNIDA 1973-2004) (Sial, Madrid, 2004)

CRÓNICAS DEL LABERINTO se agotó en su día. Se encuentra completo en CONTRAFÁBULA” junto con mis otras ocho primeras publicaciones también agotadas.
Para adquirir : www.agapea.com

ALGUNOS POEMAS DE CRÓNICAS DEL LABERINTO


EL SEXTO DIA
Dios dibujó sus párpados con ocre de la tarde
y con un leve gesto de la mano
domesticó la sangre para siempre.
A partir de los últimos sollozos
de la nada
hizo nacer un corazón de bestia,
una espalda de arcángel desterrado,
una brizna de luz
en un caparazón de sueños y preguntas.
El dolor se hizo carne ensimismada
y comenzó la cuenta de los días.


«ESTÁN LOCOS ESTOS ROMANOS», DICE OBELIX

Las batallas las ganan los más fuertes,
pero no es importante ganar una batalla.
Lo que importa de veras
es jugar en el barro con los zapatos nuevos,
o acudir tarde a clase de francés
porque hoy no llueve.

Una vez puesta la bandera
en la torre más alta del castillo,
lo verdaderamente bueno
es comer palomitas frente al televisor,
rascando las orejas del perro de la casa,
y esperar a que llegue, sin más cuentos,
la hora de la cena.


"EPPUR SI MUOVE"
La ropa a veces, mientras duermo, se me marcha a la calle,
juega en parques lejanos y navega columpios,
siempre termina en algún bar
donde a los camareros, anfibios de fatiga, no les importa nada
que las últimas copas de la noche
resbalen por un cuello de camisa
que no lleva cabeza.
Suelen ser húmedas las calles,
por eso viene luego mi ropa destemplada, tose por el pasillo,
y me despierta,
cuenta extrañas historias de relojes
acudiendo a su cita con el tiempo de nadie. Casi nunca la entiendo.
Dice que hay un ilustre papagayo
que se mira las plumas en el borde afilado de las últimas luces.
Entre sueños me esfuerzo en regañarla,
le digo que no es hora de andar con cuentos raros,
que como tantas veces me quedaré despierto por su culpa.
Ella siempre sonríe
como un niño más triste y más travieso que la luna
y se vuelve a dormir
en el respaldo de una silla.


UNA NIÑA DE AZUL CON UN PLUMIER DE PINO
Ha muerto en Conde Duque
una niña de azul con un plumier de pino.

Es una vieja estúpida la noche de Madrid, una mueca sin dientes que recuesta su rictus de sonrisa en las aceras.
A lo lejos,
detrás de tanta fiebre de tejados,
hay un jardín con úlceras, con hambre, que golpea el perfume de café,
la tos de una muñeca
que se perdió en el fondo de la tarde. Jeringuilla de plástico y mentiras.

Me subo el cuello del abrigo,
no hay nada que decir, poco que hacer. Fatiga.
Pasa un ruido descalzo de autobuses
que dibuja la sangre para fotografías de turismo.
Cerca quizás, para qué buscar lejos, hay alguien que se gana la piel tostada y limpia
con el pálido labio
de esta niña sin horas que cambiaba sus sueños por un grito en el brazo.

Me detengo a buscar por los bolsillos cualquier cosa,
un poco de tabaco, calor para las uñas,
refugio contra el miedo,
y esas muchachas tímidas pasan corriendo como siempre,
novias tontas que han de llegar a casa sin mirar las paredes don­de todo se vende con rápida sonrisa.
Calle de la Princesa, veloz la luz, el aire, el agua que mañana llegará hasta la plaza.
Pero la niña azul no corre.


UN LIBRO DE MAYAKOWSKY
EN LA MESILLA CON UN FONDO DE BLUES


Ha descolgado su teléfono
pero ya no es capaz de recordar el número preciso.

La cortina se mueve dulcemente,
cadera de bordados que acaricia la luz tras la ventana.
A lo lejos
suenan las voces de los niños
que el otoño conoce por sus nombres. Huele a lluvia tranquila.

Su mano izquierda ha conseguido
marcar el número imposible. Hacía tanto tiempo...

Un hilo de sirenas, como siempre,
va cosiendo la tarde
para que no le cuelguen los harapos,
para que la ciudad no se deshaga como un muñeco antiguo.

Los pitidos son largos y monótonos,
melancólico blues que se riza en los cables de la desesperanza.

La prensa de mañana contará muchas cosas,
disputas de políticos, nuevos descubrimientos,
los últimos apuros del banquero de moda, asuntos importantes;
pero no habrá entendido
que la noche es un pájaro lleno de certidumbre,
que de nuevo «la barca del amor
se estrelló sin remedio contra la vida cotidiana».

Nadie cogió el teléfono.
La tristeza quedó junto al balcón abierto como una enredadera.

En el húmedo asfalto, un reguero de sangre
va dibujando poco a poco
el silencio.


CANCIÓN DE AMOR

La duda tiene nombre de mujer
con ojos tristes,
es hija de la luz y los espejos,
besa como jamás besó su hermana la certeza,
y a veces, por la tarde, se viste con un traje de alquitrán
y acapara la noche.

Es una puta descarada que nos sonríe por oficio,
una perfecta zalamera
de la que nos enamoramos
cuando por vez primera nos parece que ya somos poetas.
Luego siempre se encarga
de romper en pedazos el cristal del orgullo,
de hacer que se nos crispe la risa por venir.

Está loca,
se ha metido en mi cama con un ciego susurro
de besos de jengibre
y ha violado mis sueños más hermosos.
Despertaré mañana, estoy seguro, con resaca de noche malograda,
la voz entumecida
y una larga distancia respirando en mi boca.

Es para odiarla ...
pero la quiero tanto...


TERCERA CRÓNICA DEL GUARDIÁN
(El Hechicero)

"... Ma se senza ingiuria vostra io potessi fruirlo, rendetevi certo che saria in me quella letizia ch'essere in alcun uomo sia possibile." (Ludovico Ariosto, Il Negromante) (1)
El hechicero acaba su tarea,
acaricia su barba satisfecho
y sus labios se curvan en lánguida sonrisa
—la que debe tener todo alquimista que aprecie su trabajo—.

La luna se despide como un guiño
de los últimos juegos de la noche.
La lechuza es un bus que aún lleva luces
y susurra un final, como Louis Armstrong, de Jazz expresionista.


Recoge los papeles, guarda todas las fórmulas en verso
tras el aparador de palisandro
mientras un gato insomne y circunspecto,
con el lomo de azúcar y de miel, afirma silencioso
que él ya lo sabe todo
Va tapando los frasco uno a uno,
los matraces de esencia,
las redomas con uña de lagarto y ese polvo amarillo de mandrágora
que hace azules los sueños.

El horizonte empieza a recitar
una canción de cuna para la espalda de la noche.
Es hora de acabar los sortilegios,
que descanse el mercurio en su probeta y el ala de murciélago en el aire.
Los Rollings sustituyen al Cármina Burana.

El hechicero cuelga el mandilón,
se cambia de zapatos, deja su gorro frigio en un estante,
anuda su corbata de seda milanesa,
y se va a la oficina como todos los días.


(1) "...Pero si yo pudiera disfrutarlo sin ofenderos, estad seguros de que sería dueño de la mayor alegría que hombre alguno pueda poseer."



CRÓNICA DE LOS HÉROES
Escucha Guilgamésh,
Uruk, donde los cedros abrigaban tu trono,
ya no existe.
La serpiente comió la verde rama de la inmortalidad
y nada ha vuelto a ser lo mismo.
Los héroes como tú no tienen una hazaña que llevarse a la espada.

Ulises está lejos,
se ha perdido en las islas olvidadas,
al norte del estrecho que las sirenas cosen con su canto,
y ahora es Indiana Jones quien regresa a su casa
silbando una canción de Tina Turner;
arañas hacendosas, en los techos del mundo, ven pasar su sombrero.

A Robin Hood le tiembla el pulso
y el Pequeño Gran Juan da clases de gimnasia
para artistas de Hollywood.
Aquiles, el aqueo, el de los pies veloces,
tiene artritis y tose con frecuencia, el talón le ha crecido,
y anda vendiendo vasos de cerámica
para turistas sudorosos.
Ahora es Superman el que más corre, el que vuela,
el que sujeta un mundo con sus manos
mientras Atlas se sienta en un banco del parque
para dar de comer a la palomas.

A Sanson le ha vencido Schwarzenegger,
al que incluso le pagan una buena fortuna por luchar con los malos
sin que le caiga encima un templo.
Guillermo Tell quedó para contar sus aventuras
a unos nietos que piensan en binario
y ya no le comprenden.

Conan, el gran cimerio; San Jorge y su dragón;
Sigfrido el valeroso, que también tuvo el suyo como tantos;
el propio Peter Pan, que al final ha crecido;
y tu amigo Enkidú,
y el mismo Don Quijote de la Mancha,
Todos los esforzados paladines de mi mesa camilla,
están haciendo cola
para ver si les dan el subsidio de paro.

Y es que los viejos héroes se han pasado de moda,
desconocen el flujo misterioso de los ordenadores
y dan siempre al botón equivocado.

Escucha, Guilgamésh, amigo mío,
deja que el mundo siga con sus horteras veleidades
y no le des más vueltas.
Sentémonos al sol, fuma de mi tabaco.
Sonreiremos.



ÚLTIMA CRÓNICA DEL GUARDIÁN
(En la Ciudad Abandonada, algún día del Tiempo Nuevo)


Para nadie este sol que adelgaza la tarde entre ventanas.
Sólo para la hormiga
que recita los salmos más antiguos.
Sólo para la araña de vientre milagroso
que hace de la liturgia su despensa.
Sólo para los juncos,
bebedores de ácido y fosfato.
Sólo para el gusano taciturno,
considerando siempre los pequeños asuntos de la tierra.

Para nadie la muerte dibujada en los muros asustados
de esta ciudad sin niños.
Sólo para la rata de los ojos enfermos
por los siglos de sombra.
Sólo para el zapato solitario,
mudo testigo de una estirpe
suicida.
Sólo para este polvo que dejó la locura,
monarca indiscutible de las calles,
sin dueño y sin futuro.
Sólo para este sucio laberinto con las cuencas vacías.
Sólo para mis manos, escoria enamorada,
que dejarán muy pronto esta tarea.

Para nadie.

8 ago 2008

POEMAS DE OCASIONES ESPECIALES


Son muchas las veces que amigos o conocidos te piden un poema para una antología temática o un congreso o algo así.
Muchas veces son poemas "de oficio", "por encargo" y eso entraña ciertos peligros poéticos; otras veces, aprovechas poemas que ya tenías y así suele ser mejor.
De muchos, no conservo ni copia ni memoria.
Pongo aquí algunos ya que, al menos, suelen ser variados y curiosos.
(Contra la violencia de género... contra el 11-M... a favor de los perros... sobre los toros... LA VARIEDAD ES MUCHA, ojalá os agraden.)

Poema con el que colaboré en la antología “FINAL DE ENTREGA, Antología de poet@ contra la violencia de género”En ella se incluyen ”...poemas de poetas españoles y de numerosos países como Italia, Francia, Estados Unidos, Irán, Siria, Marruecos o Latinoamérica., que exploran esta candente temática desde perspectivas muy diversas: desde la exaltación de lo femenino o la maternidad, a la crítica social más acerada...” (contraportada del libro)

Editado por : Colectivo ediciones, 2006. (ISBN: 84-611-0596-6).
Coordinado por Balbina Prior.


BUENA NUEVA“Perdónalos porque no saben lo que hacen”
(Evangelio de Lucas, 23, 34)

No le digas a nadie tu nombre verdadero.
Escóndete, reniega de tu origen,
no vuelvas la cabeza.
Tu mundo se acabó ¿era tu mundo?

Sal a la luz. Hay luz, es clara y tibia.
Deja que la sonrisa te visite de nuevo.
Haz con el miedo el último gazpacho
y bebe a tu salud.

Pero no le perdones, porque sí sabe lo que hace.



Poema que figura en la antología"11-M: Poemas contra el olvido", para recordar los atentados de Atocha, El Pozo y Santa Eugenia, del 11-3-2004.
Editado por Bartleby, Madrid, 2004.

Estos versos fueron también utilizados en un espectáculo musical con el mismo fin.

NO
No hay bandera que valga un sólo muerto.
No hay fe que se sujete con el crimen.
No hay dios que se merezca un sacrificio.
No hay patria que se gane con mentiras.
No hay futuro que viva sobre el miedo.
No hay tradición que ampare la ignominia.
No hay honor que se lave con la sangre.
No hay razón que requiera la miseria.
No hay paz que se alimente de venganza.
No hay progreso que exija la injusticia.
No hay voz que justifique una mordaza.
No hay justicia que llegue de una herida.
No hay libertad que nazca en la vergüenza.


Poema con el que colaboré en la plaqueta “LOS TESOROS DEL AGUA” realizada a todo color por el Pabellón de la Unión Europea en la Exposición Mundial de Zaragoza 2008
Colaboraron varios poetas. La edición se hizo trilingüe, en español, inglés y francés. junto con unas magníficas fotografías de Miguel Ángel García.

Se nos sugirió a cada poeta un aspecto relacionado con el agua y se nos pidió que incluyésemos en los poemas la palabra agua y la palabra Europa.


BRINDIS
Aquel hombre del norte alzó su vaso
y brindó sin dudar por el futuro.
Alguien dijo: — Con agua te aseguro
no se debe brindar, con vino acaso...

— Con agua —insistió—, sí, no es un mal paso
brindar con este líquido tan puro
que nos sobra en Europa y es tan duro
conseguirlo en el sur donde es escaso.

Brindar y luego repartir a manos
llenas, de norte a sur, de sur a norte:
Esto es progreso, así somos humanos.

Para todos el agua y que no importe
ni el idioma ni el dios ni la frontera,
ni la sed ni el color ni la bandera.

Para ver la plaqueta completa (fotos, poetas, idiomas, etc.)

http://www.e-cons.net/expo_zaragoza/poemas.pdf


Poema con el que colaboré en la antología “VIDA DE PERROS”
En ella se incluye un buen número de poetas de todas las procedencias, con poemas dedicados a esos compañeros inseparables de los seres humanos que son los perros.
Editó: “Ediciones del 4 de agosto”
( http://www.4deagosto.com/ ) junto con Editorial Buscarini. Colaboró la Asociación Protectora de Animales de La Rioja y otras mucha entidades públicas y privadas.
Organizó la edición: Diego Marín
diegomarina@gmail.com


EL ÚLTIMO PASEO

“Y seguirá Sabina cantando por el fondo del pasillo,
por donde aún parece que respira mi perro, (todos saben,
o deberían saber, que Nico se murió hace ya algunos meses
de la inyección más dulce que encontramos)”
(E.G.T. De Crónicas del laberinto, Madrid, 1992)


Vamos a dar el último. Despacio, muy despacio.
Ni mi dolor ni el tuyo tienen prisa.
Hoy no conquistaremos un castillo
ni saldrá la vecina del primero
para decir “¡qué guapo! ¿es policía?”
Esta mañana pálida no se va a señalar en las agendas.
Esta crónica no saldrá en la prensa.

Te duele todo, ya lo sé, y a mí ¿qué te has creído?
Es el último juego nada más, disfrútalo aunque hiera,
la última pirueta ya sin fuerzas,
el último ladrido, la última ocasión.
Porque ya no podemos, porque ya...


Poema incluido en un Congreso Médico sobre las Lágrimas. Sé que se editó en un póster de gran tamaño, en el Palacio de Congresos de Madrid, junto con otros poemas que nos pidieron a distintos autores. La cosa tiene su encanto

RESISTIR
Nada hay tan fuerte
como una lágrima que, azul,
levanta el vuelo
al despegar del dorso de la mano
que la arrancó del rostro.
El aire se estremece, las orillas del mundo
se alejan
en el momento inmóvil de ese vuelo.
Y una tremenda multitud de pájaros
surca la altiva frente
que rechazó la calma y se enfrentó a la vida.
(Poema del libro “Crónicas del Laberinto”. Aparece en “Contrafábula, poesía reunida 1973-2004)


Este poema me lo solicitó Enrique Barrero, Presidente del Ateneo de Sevilla para la antología “Homenaje a la FIESTA DEL SONETO” (Sevilla, 2006) http://www.ateneosevilla.org/
Alguien perdió mi envío (realizado dos veces) y el poema no apareció en la antología. Sé de algún poeta susceptible que hubiera hablado de “manos negras”. No es mi caso. No aparecí por algún error y punto. ¡Qué le vamos a hacer! Sí me hubiera gustado estar junto a los amigos y buenos poetas que aparecían allí.

El poema de tono humorístico tiene la peculiaridad de llevar como cita otro soneto de mi amigo Luis Alberto de Cuenca, al que contesto con el mismo humor con que él escribió el suyo (¡dos sonetos por uno, oiga!)






SONETO APÓCRIFO DE UNA VECINA DE LUIS ALBERTO DE CUENCA, HARTA DE CONSPIRACIONES DE OPERETA EN SU DESCANSILLO

NUESTRA VECINA
(A Javier del Prado)

Tiene, Javier, nuestra vecina un talle
que resucita a un muerto, y unos ojos
que derriten el plomo y dan antojos
a quien se los tropieza por la calle.
Hay que trazar un plan que no nos falle
para descerrajarle los cerrojos
y pasear en triunfo sus despojos
cuidando hasta el más mínimo detalle.
Tú en el portal y yo en el descansillo,
siempre al acecho, cristalina media
velándonos la cara y un cuchillo
afilado. Si Dios no lo remedia,
de la vecina haremos picadillo
y de un cuento vulgar una tragedia.”
(Luis Alberto de Cuenca)



Menudo vecindario me ha tocado
en suerte. No me explico cómo puedo
salir del ascensor, bajar sin miedo
la escalera, si un tal Javier del Prado

y un poeta famoso y descarado
andan urdiendo planes con denuedo
para hacerme escabeche. Y lo hacen quedo,
huidizo el cuerpo, el rostro enmascarado.

En el portal ocultan su colmillo
acechando el palmito de mi menda
y dicen que han de hacerme picadillo.

Mujer al fin, decido la contienda:
No hagáis más el canelo en el pasillo
y pasad a mi casa que hay merienda.


Este poema lo envié al Aula de Cultura La Venencia, de Santander, desde la que Salvador Arias me pidió un poema de ambiente taurino para una antología.
Parece que está publicado el libro ANTOLOGÍA POESÍA ESPAÑOLA DEL SIGLO XX, (2003) con 239 poetas pero que no me incluyeron. En breve saldrá una edición corregida y aumentada en la que sí aparezco.
Mucho me temo que el poema es más a favor del toro que taurino: Un toro que se finge cojo para librarse de la lidia y que sale “sonriendo” de la plaza para terminar montando vacas en el campo, no sé si puede agradar a los amigos del “arte de Cúchares”
No puedo negar mi admiración por la plasticidad de ciertos aspectos de las corridas de toros, que disfruté en su día, pero con el tiempo me he separado de ese mundillo. Eso sí no soy un activista.



EL TORO COJO
(Porque alguien dijo un día que la sonrisa
es un atributo únicamente humano)

No tuvo que medir su corazón
contra una virgen de tabaco y oro
en la arena de un mayo casi fiebre.
No tuvo que morir bajo la sombra
ciega de gritos y pañuelos ciegos,
a volapié del sueño y el delirio.
El ritual siguió sin que su sangre
fuese espejo de música y metal.

Hecho como un soldado negro y fuego,
no hubo estéril batalla que librar,
no fue gloriosa la ocasión ni tuvo
la muerte tiempo para urdir su encaje.
Hecho como un esclavo de la gloria
para una ley de agónicos instintos,
no enfrentó su coraje oscuro y firme
a la llamada de su juez de acero.
Hecho como una estatua de la tarde,
no tuvo que inclinarse ante la astucia
ni humillarse dolido ante el engaño.

Su pecho trenzó el aire unos instantes
por aquella prisión de túnel rancio
y fue a buscar la libertad fingida
sin agua ni paisaje ni horizonte.
Vieron entonces todos cómo andaba,
pese a tanta hermosura, torpe y cojo.
Y alguien le reclamó por su apellido.
Su casta le valió para volver
de macho en otro campo sin banderas.

Hay quien dice que al paso de salir,
mansamente escoltado por cabestros,
dejaba poco a poco su cojera
y una sonrisa humana y maliciosa
se reflejó en la puerta de chiqueros.


Este soneto lo hice a petición de mi buen amigo Juan Ruiz de Torres, con ocasión de una cena que coincidía con una fiesta de Difuntos, en plan “aquelarre” poético.
Se nos pidió un poema de aspecto gastronómico.

También se lo envié a la escritora mexicana Dana Gelinas, que preparaba una antología de “poemas gastronómicos”. Desconozco si el proyecto llegó ya a buen puerto.


ARTE CULINARIO DEL AQUELARRE
Unos gramos de flor de manzanilla,
algún hueso de santo o un colmillo
de hereje o de zorrona, un higadillo
de cornudo feliz a la parrilla,

aliñados con sal, ajo y guindilla,
y regados con sangre por vinillo,
son pitanza que mata el gusanillo
a brujos y comadres de escobilla.

Mas tú en esa bazofia sé discreto,
déjala para amigos del ojete
del cabrón nigromántico y paleto.

Que socorran tus hambres un filete,
un buen potaje, gambas o chuletas,
y manda el aquelarre a hacer puñetas


Poemas, más o menos epigramáticos, publicados en la antología “VIGENCIA DEL EPIGRAMA” editada en México, 2006, Ediciones Fósforo edicionesfosforo@yahoo.com.mx
ISBN 970-94427-1-6
Antólogo: el poeta Héctor Carreto.

Aparecen en la antología una espléndida muestra de poetas mexicanos y del resto de los países hispanoamericanos, y junto a ellos estamos cuatro españoles (José Verón Gormaz, Enrique Badosa, José María Álvarez y yo mismo)
Aquí aparecen los poemas que seleccionó de entre los míos Héctor Carreto.

SI TÚ NO ESTÁS
A Andrea Navas

El Paraíso debe estar vacío.
Si tú no estás, quién va a querer estar.
Sé que andan de tertulia por la puerta,
incluso Dios mira el reloj y fuma
y se hace el remolón hasta que llegues.
Entonces todos entrarán de golpe.


CONSEJO MALVADO

Imitar a Li Po es sin duda elegante:
escribir unos versos y hacer con ellos barcos de papel
que la corriente del río se lleve poco a poco..
Exquisito, sin duda,
pero procura tú ser cuidadoso
y guardar lo que escribes,
que bastantes basuras se arrojan a las aguas.


LA ULTIMA DAMA

Cuando la muerte tiene ganas de jugar
no hay quien la aguante.
Hace trampas,
se pone impertinente,
salen diez reyes por baraja y todos para ella.
Es la mujer de hueso más fullera
que he conocido nunca.
Y lo peor
es que no necesita hacernos trampa
para ganarnos la partida.


FIDELIDAD
¿Que por qué sigo aquí?
Porque en amor quien ama menos, manda,
y no quiero dejarte hecha unos zorros,
sin tropa a quien mandar.
Así que yo me quedo
para recibir órdenes, cariño.


ME DICES QUE HAGA UN VERSO PARA TI. AQUÍ TIENES DOS

Qué voy a saber yo de lo que quieres
si a penas sé qué es lo que quiero yo.


EPIGRAMA-SOLEÁ

Hijo mío, mientras creces,
que no te engañe la vida
y tú engáñala si puedes.


CIUDADANO KANE (Orson Welles)
Vendo trineo de madera
en el que fui feliz hace mil años.
Lo demás que lo quemen en pública subasta.
Rosebud,
Rosebud,
Rosebud,
¡zas!


Poema enviado para una ANTOLOGÍA SOBRE LAS ESTACIONES DEL AÑO
preparada por el escritor peruano Leo Zelada.
En este momento debe faltar poco para publicarla.
Leo Zelada es hombre de múltiples iniciativas y escritos.


PARTE METEOROLOGICO
La primavera tiene buena fama,
pero el otoño saca las uñas como el oro,
y en octubre
la esperanza es un tibio corazón
lleno de vino.
Los días son de porcelana,
pequeños y esmaltados,
con una línea roja al final de la tarde.
No dejen de ponerse una bufanda
para abrigo de sueños.
Pasaremos ahora a nuestro informe deportivo...

(Y me quedé mirando a la pantalla
como si fuese tonto)

(Poema incluido en Contrafábula, poesía reunida, 1973- 2004)

2 ago 2008

TERTULIA-TALLER DE POESÍA 08-09


TERTULIA-TALLER DE POESÍA DE
ENRIQUE GRACIA TRINIDAD
Ya hay calendario para 08-2009
Se celebrará siempre en lunes.
Cada sesión estará abierta entre las 19 y las 22 horas
Los asistentes podrán permanecer las tres horas,
o llegar y marcharse según les convenga.
Podrán traer un poema propio
a ser posible que no supere una página
(siempre con mínimo de 10 fotocopias)
o, en su defecto un microrrelato
con un máximo de 10 ó 12 líneas
(también con sus fotocopias)
CALENDARIO
2008Sept: 22
Oct: 6 — 20
Nov: 3 — 17
Dic: 1
2009Ene: 5 — 19
Feb: 2 — 16
Mar: 2 — 16
Abril: 6 — 20
May: 4 — 18
Jun: 1
Los últimos lunes de mes siempre se recomendará asistir a la sesión correspondiente de POETAS EN VIVO, en la Biblioteca Nacional.Cualquier cambio o actividad especial será indicado en su momento.
Se mantiene la cantidad de horas y la aportación
igual que en los dos cursos anteriores
RESERVAS:
91 74715 47
ó